A la luz del décimo aniversario de la entrada en vigor del Tratado de Lisboa, la Unión Europea (UE) presenta una realidad distinta respecto a la etapa anterior en sus dimensiones interna y externa.
Respecto al ámbito exterior el Tratado ha promovido, por un lado, una mayor visualización y constatación de la UE como actor normativo el cual se caracteriza en la escena internacional por la defensa de un modelo de gobernanza singular que es reflejo de su propia dimensión interna.
Por otro lado, el actual tratado ha dado paso a la configuración de la UE como un verdadero actor diplomático que en ningún caso sustituye, sino que por el contrario refuerza su tradicional actuación normativa. En concreto destacan los cambios introducidos en cuanto a las nuevas competencias del Alto Representante, la puesta en marcha del SEAE y la configuración de una extensa red de Delegaciones que, en definitiva, suponen el establecimiento de un “ministro”, “Ministerio” de Asuntos Exteriores de la UE y “embajadas”.
Todo ello ha permitido a la UE dar una respuesta más cercana a la dinámica que presenta la actual escena internacional en donde distintos retos y amenazas, pero también oportunidades han demandado una actuación distinta. Dicha respuesta se enmarca en la “Estrategia Global para la Política Exterior y de Seguridad de la Unión Europea” (junio de 2016.), que se caracteriza por ofrecer un marco de acción más afín a las tendencias actuales a través de medidas como el refuerzo del principio de pragmatismo o la noción de resiliencia estatal/social. Es innegable, no obstante, que los cambios más ambiciosos de la Estrategia se inscriben en el ámbito de la seguridad y defensa, lo que ha supuesto una inicial configuración de la UE como actor defensivo gracias a iniciativas como la Cooperación Estructurada Permanente.
Con el fin de profundizar y reflexionar sobre estos cambios los profesores Francisco Aldecoa, Noé Cornago y Victoria Rodríguez organizamos el seminario titulado “Teoría y Práctica de la diplomacia común europea” en la Escuela Diplomática, en 2018. Por su parte, la presente obra recoge las principales reflexiones del seminario con aportaciones novedosas y desde enfoques distintos que permiten ofrecer al lector un análisis innovador sobre la materia.