La integración de la inteligencia artificial en el ámbito militar supone una revolución que modifica los parámetros de las operaciones militares y de los conflictos armados. A la existente guerra remota, que garantiza una mayor distancia entre combatientes y procesos automatizados durante la acción militar, sucede la posibilidad de diseñar, desarrollar, desplegar y utilizar armas cuyas decisiones dependen en buena medida de algoritmos preestablecidos y de procesos de aprendizaje que permiten a un sistema armamentístico autónomo letal mejorar sus prestaciones al poder adaptar sus reacciones y comportamientos en base a su experiencia inteligente. El avance tecnológico continúa hacia el diseño, desarrollo, despliegue y uso de enjambres que se componen, total o parcialmente, de sistemas armamentísticos autónomos letales. Estos conjuntos de módulos reconfigurados para la guerra inteligente se inspiran en el swarming existente en la Naturaleza y proporcionan a su poseedor una ventaja militar definitiva por su tamaño modificable a voluntad, la flexibilidad de su configuración y su capacidad de destrucción. Esta obra aborda algunas cuestiones de Derecho internacional que suscita el swarming letal cuyo desarrollo y uso genera dudas fundadas relativas a su adecuación a las normas protectoras de los derechos humanos, el Derecho internacional humanitario y el principio de prohibición de amenaza de uso y del uso de la fuerza, a la vez que reta el tradicional binomio persona-Estado que representa la base para la garantía del cumplimiento del Derecho internacional y el establecimiento de la responsabilidad.