El libro aborda la cuestión de los flujos migratorios mundiales, con especial atención a la migración irregular. Presenta y evalúa los principales generadores de migración, así como las recientes políticas aplicadas para gestionar estos flujos en Asia Oriental y Meridional, la Unión Europea y Estados Unidos.
De manera crucial, los capítulos exploran cómo interactúan los diferentes actores en la utilización o promoción de los flujos migratorios desde un punto de vista humanitario, político, criminal y de seguridad, poniendo así de relieve el papel central que desempeñan las mafias dedicadas al tráfico de migrantes.
El libro llama la atención sobre el papel fundamental de dichas mafias, su creciente transformación y transnacionalismo, y la inadecuada respuesta y adaptación de las políticas estatales y las fuerzas policiales.
También pone de relieve la creciente utilización de la migración por parte de diversos Estados en sus políticas de influencia, cuando no de agresión, hacia terceros países, en ausencia de una clara respuesta disuasoria.
De cara al futuro, el libro destaca la creciente importancia de la compleja cuestión de la migración inducida por factores medioambientales.