En la primera década del siglo XXI, aunque insertado en un ciclo histórico de apropiación, comenzó a despertarse un colosal interés por la tierra y sus recursos por parte de inversionistas públicos y privados de todo el mundo. Esta denominada "fiebre por la tierra" se contextualizó en el marco de una crisis sistémica: crisis económica, alimentaria, energética y medioambiental. De la conjunción de estos elementos, se concretó lo que ha pasado a denominarse "acaparamiento global de tierras". Estas prácticas inversionistas estriban, en términos generales, en la adquisición del control de grandes extensiones de tierra por parte de sujetos estatales o actores privados para su explotación económica, provocando con ello el desplazamiento forzado y la grave vulneración de derechos humanos de las comunidades rurales afectadas. La presente obra se caracteriza por abordar este fenómeno inversionista desde el enfoque específico de su grave afectación a los derechos humanos. Para ello, el punto de partida es la aproximación conceptual al fenómeno, así como a sus principales actores involucrados, dinámicas y usos de la tierra acaparada. Constatando su preocupante expansión, se realiza un análisis de las graves vulneraciones de derechos humanos que se cometen a su paso, pudiendo constatar que el marco jurídico internacional deviene ineficiente frente a su perpetuación. En búsqueda de propuestas frente a este preocupante diagnóstico, en la obra se invoca el necesario avance hacia la consolidación de un derecho humano a la tierra. Prólogo de José Elías Esteve Moltó.